Desde Revista Mía
Se trata de una enfermedad silenciosa (no produce síntomas) que afecta especialmente al sexo femenino, hasta el punto de que una tercera parte de las mujeres de más de 45 años la sufrirá. ¿Por qué? El capital óseo va descendiendo con el paso del tiempo y se acelera en la menopausia, momento en el que se dejan de producir estrógenos, una hormona que, entre otras funciones, repone la masa ósea. Pero esta no es la única razón para el desarrollo de esta dolencia, un patrón dietético deficitario y un estilo de vida poco saludable también influyen.