Desde El Español
El calabacín (Cucurbita pepo), es una de las especies de plantas domesticadas más antiguas. Su cultivo se extendió desde México hasta Texas y Maine. Cuando españoles y portugueses llegaron a América, trajeron esta fruta, extendiendo así su cultivo por Europa. Su éxito fue tal, que desplazó a la especie dominante, la Lagenaria siceraria, más parecida a una calabaza clásica. Incluso tiene su propia festividad, cada 8 de agosto se celebra en EEUU el Día Nacional del Calabacín.
En 2019, la producción mundial de esta fruta llegó casi a los 28 millones de toneladas, unas cifras que dan fe de su popularidad, ya que es un alimento bajo en calorías, pero plagado de nutrientes. «El principal componente del calabacín es el agua, proporcionalmente le siguen los hidratos de carbono y posee pequeñas cantidades de proteínas y grasas», explica a EL ESPAÑOL María Carmen Japaz, dietista y nutricionista.